Tengo una mochila rota, un paraguas vacío, un sombrero con un reloj de cuco, un abrigo viejo y un baúl, pero en él no me caben todas esas cosas y la mochila está rota, roida por ratas que me atrapan el alma.
De donde vengo salen palomas de los paraguas que vuelan libres hacia el cielo en busca de gotas de lluvia de las que se alimentan, dá sed sólo de pensarlo.
El reloj de cuco a pesar de estar muy alto no hace amistad con ellas y le canta al oido: bang, bang, pistolas de humo de trenes que pasan dejando tras de sí la estela de un final feliz.
Mi abrigo es largo y el viaje corto, "de aquí a la eternidad", ¡puede ser mañana¡
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